Aave está en medio de una crisis de gobernanza. Esto gira en torno a quién debería controlar la marca y sus activos. Así se ha intensificado la división existente entre la Aave DAO, los titulares de tokens, y Aave Labs, la firma de desarrolladores centralizada detrás de la tecnología del protocolo.
La crisis de gobernanza fue provocada por la asignación de tarifas de intercambio de una herramienta comercial a Aave Labs en lugar del tesoro de la DAO. Esto planteó preguntas sobre la propiedad de la marca, marcas registradas, dominios y cuentas de redes sociales de un protocolo que tiene más de $33 mil millones en valor total bloqueado, alimentando el argumento de que el control de la marca debería alinearse con los riesgos asumidos por los titulares de tokens.
Sin embargo, el último recuento de votos muestra que la mayoría de los votos emitidos están en contra de transferir la propiedad a la DAO. Estas dinámicas intrincadas muestran las tensiones entre descentralización, eficiencia y desarrollo en la gobernanza de los protocolos DeFi.






