He visto cosas locas en el espacio cripto, pero esta se lleva la palma. La saga del memecoin MIRA con Siqi Chen y su token ZERO es un ejemplo de libro de por qué nunca debes entrar a ciegas en tokens, incluso si provienen de un desarrollador conocido.
El experimento
Así que aquí está la primicia: Siqi Chen decidió lanzar un token de prueba llamado ZERO en una plataforma de memecoins basada en Solana. Ahora, este no era un token cripto cualquiera. La descripción era cristalina: "No hace nada y nunca lo hará. Vale cero."
A pesar de la advertencia tan clara, la gente se volvió loca por él. Una ballena incluso gastó 208,900 dólares en el token.
El auge y la caída
Al principio, el token se disparó, ganando un 178% desde su inicio el 30 de diciembre. El volumen de comercio fue una locura: 32 millones de dólares, empujando su capitalización de mercado a más de 710,000 dólares. Pero, por supuesto, esto era solo un espejismo. En pocas horas, cayó casi un 70%, solo para recuperar una pequeña cantidad después de eso.
Todo esto muestra el caos absoluto y el fervor especulativo que caracteriza el comercio cripto. Incluso con la advertencia explícita, la mentalidad de "hacerse rico rápido" se activó para muchos.
Las consecuencias
Siqi Chen, por su parte, no vio esto venir. Admitió que se sorprendió por la popularidad del token y por el hecho de que la gente ignorara la advertencia. Vendió el 40% de la oferta por 444 SOL, solo para luego recomprarlo y quemar los tokens para ayudar a limpiar el desastre.
Y en un gesto de buena voluntad—o tal vez de relaciones públicas—dijo que reembolsaría a quienes perdieron dinero usando sus propios fondos, separados de la billetera de MIRA. También mencionó airdrops para las víctimas.
La imagen más grande
Pero no olvidemos: esta no es la primera vez que vemos este tipo de caos. Mark Longo, el propietario de Peanut the Squirrel, famoso en internet, enfrentó un problema similar cuando lanzó un memecoin rival, $JUSTICE.
Estas situaciones sirven como recordatorio de que el mundo cripto es un campo minado especulativo. Los creadores de tokens deben proceder con cuidado y ser conscientes de sus responsabilidades hacia los inversores.






